En los últimos años, se han presentado una serie de acontecimientos que han afectado el sector financiero, generando pérdidas económicas e incertidumbre en los mercados; en la medida en que estas circunstancias se presentan, los reguladores refuerzan sus regulaciones en materia de gobierno corporativo, gestión de riesgos y controles internos en búsqueda de dotar de mayores herramientas a las Entidades para gestionar sus objetivos en un entorno cada vez más dinámico.
Para acceder al artículo completo, le invitamos a hacer clic en el siguiente
enlace.